Visitas

viernes, 13 de abril de 2012

Decirte esas cosas que nunca te he dicho.

Soltarlo todo. Quedar libre de ti, de tus miradas. Vacía de tus manos.
No hacer borrón y cuenta nueva, sino arrancar la hoja, y escribir en otro pedacito blanco.
Esas cosas que no supe como decirte, y ahora ni merece la pena, ni quiero hacerlo.

Como hablar de ti, con el mundo, a parte de conmigo.
Tu y yo. Sólo yo. Yo, y yo misma. Ellos.
No puedo. No quiero. Es demasiado, una vez más me sobrepasas.
''El color de la chica gris, va variando con el azul ultimamente. Y si está gris, pero apetece un poco de sabor, saca el chuvasquero azuleléctrico del armario y a la calle. Va intentando recuperar el color que la caracteriza, como los sugus de piña. Poquito a poco lo va consiguiendo, todo lo que la rodea vuelve a sus tonos iniciales''.

Las ganas y la ilusión las tengo. Las ganas de tormenta, de caminar bajo la lluvia, de que lluevan sonrisas y miradas de esas que lo dicen todo.
Ganas de vivir. De gritar. De sonreir como nunca.
De abrazarme a ellos. Pasarlo bien. Asaltar el mundo poquito a poco. 
De comernos el mundo y marcar vidas.
De dejar huella. Sacar sonrisas. 
Hace unos días que tengo ganas de una canción al oído. 
Un abrazo de tu amor con guantes.
De los susurros de abril. Del sentir. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario