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lunes, 29 de abril de 2013

Que no me dan las palabras para expresarlo todo

Llegó a Abril, y con este cuarto mes del que vivo enamorada, las ganas se multiplicaron,
los días restaban, y sumaban a estos dos corazones que buscaban ser uno.
De repente era veintiuno y pusimos un palito en el papel, pero con el veintitrés aparecieron las historias de aeropuertos, de horas de espera, de trenes que recorren lugares perdidos, devastados por despedidas, y anegados de sonrisas en reencuentros. Llueven lágrimas de felicidad y tristeza.
Una carta en proceso, y Quique y James que acompañan el trayecto, mientras los nervios palpitan.
La ciudad despejada de nubes, una pantalla informa de las llegadas y una sala se va llenando de gente con un brillo especial en los ojos, con morriña y ausencias en las manos.
Mis ojos verde avellana buscan tímidos esos ojos claros. Cuatro palabras tímidas, un beso que rompe el hielo y el Polo Norte.
Una maleta mini, tamaño Ryanair, una bolsa llena de ropa, vida y ganas de nosotros, que el tu y yo se lo ha quedado la puerta giratoria.
Un pisito cuqui, dos acentos que se mezclan entre risas, el norte y el sur en unos pocos metros cuadrados.
El mundo desaparece delante de nuestros ojos, y damos paso a esta órbita tan nuestra.
Sabes cuando das con alguien que te quiere por encima de tus defectos?, 
que se mete contigo por tus manías y las aprecia?
que te mima, te quiere, y se preocupa por todo?
te observa dormir, como te despiertas, te desnuda y te tapa, te besa, y te acaricia?
se ríe contigo (y de ti), llora y te seca las lágrimas?
Pues esa persona es el para mi,
nunca había vivido tanto en tan poco tiempo, tantas sonrisas y carcajadas, sensaciones dignas de echar abajo un sietecuatrosiete, cariño y amor en estado puro, mezcladas con chocolate, paseos, cafés y miradas que hablan sin decir nada.
Es algo que no puedo ni explicar con palabras, porque es lo que dicen mis ojos cuando lo miro, o hablo de él.
Es una historia que va de calor y de desgastarse los labios, de que no den los pulmones para todo el aire que me hace falta, de un día con lluvia de fondo, y pies con o sin calcetines, barigolas con cosquillas, escribirle un te quiero en la espalda, o un infinito mil veces. De dos tontos haciendo la compra juntos, y compartiendo, vida desde en una cocina minúscula, hasta en una cama inmensa.
Ahora volvemos a ser unas manos entrelazadas separadas por milypocos kilómetros que no saben a nada, pero se sienten como chocolate amargo.
Mi rincón de los mimos se irá llenando de ganas, sonrisas y miradas para ti, en esta nueva cuenta atrás en la que no quiero pensar, y a ver quién es el listo que factura en el aeropuerto un saco tan gigante de inmensidades intangibles.
Que quen che diría, mozo, que voltarías con un chisco do meu acento, despois de arremexer ensalada, fozar nun caixón ou sorrirlle a chuvia unha mañá xuntos. 
Que máis Parvo ca ti non o hai, pero tampoco hai outro ao que quera tanto tantísimo.

1 comentario:

  1. Muchas gracias por pasarte por mi blog!!! Si, yo creo que a todas las chicas nos gustaria ver una pelicula de ese chico que nos quita el sueño pero nos devuelve la ilusion. Tu texto es precioso, me siento identificada en algunas cosas, supongo q todos los enamorados nos identificamos jajaja
    Por cierto las canciones que suenan en mi blog son 3:
    Only you Joshua Radin
    What if Joshua Radin
    When I was your man Bruno Mars (sino conoces esta cancion, te recomiendo que la busques en youtube traducida, es preciosa!!!)

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